No, «Mi Persona Favorita» no es sólo la canción de Alejandro Sanz que, justamente, se ha estrenado en estos días, aunque he de decir que no la describen mal…

Mi persona favorita
Tiene la cara bonita
Tiene un ángel en su sonrisa
Tiene un corazón y yo…

Alejandro Sanz – Camila Cabello, «Mi Persona Favorita».

Aparte de una gran coincidencia, muchos saben a qué y, sobre todo, a quién me refiero con “Mi Persona Favorita”. De hecho, para muchos de ellos también lo es. Y, a poco que te cuente, puede que para ti también lo termine siendo…

Todo nace de Mi Persona Favorita.

Incluso yo misma, aunque sea un poquito. Tanto es así, que también se ha llevado algún que otro (más que merecido) regalito por el Día de la Madre… Porque, aunque no lo es, ejerce como si lo fuera (ejerce, en presente, nada de pretéritos…).

Martamente sí que nace de Mi Persona Favorita, y no un poquito, sino del todo. No sé si es su madre o su hermana mayor, lo que está claro que ella es la que dio nombre a mi anterior Blog y que, por eso, se merece ser la protagonista de este primer post.

Pura Inspiración

Tengo la enorme suerte de tener a mi alrededor a muchas personas que son pura inspiración, cada una en su ámbito: unos por ser amor real, otros por su fortaleza, otros por su constancia… Definitivamente sí, es una suerte tener a tanta gente inspiradora cerca, tantos espejos donde querer mirarte cada día.

Sin embargo, como se suele decir, “lo difícil no es llegar, sino mantenerse”. Quizás por eso, aunque hay muchas personas nominadas, que vienen y van, ella es la indiscutible ganadora del “Premio Martamente a la Persona Favorita”. Vale, no es un Oscar, ni un Nobel, pero algo de valor habrá que darle… ¡Digo yo!

Porque lo es y lo ha sido siempre, aunque a veces no he sido consciente de ello, aun teniéndola delante. ¡Eso es lo que le hace tan especial! Ser una persona inspiradora, AUTÉNTICA, pero sin alardes, sino todo lo contrario.

Sin duda, es un estilo de vida, una forma de ser con la que se nace, y la cual deberíamos esforzarnos en aprender, aunque difícilmente conseguiremos interiorizar al 100%. Pero merece la pena intentarlo.  

El Coaching lo inventó ella.

Aunque ya os digo que, si le preguntásemos sobre su labor como coach, probablemente contestaría algo así como: “¿qué dices tú de un coche?”

Pero sí, ella ha sido mi coach particular durante toda mi vida, especialmente en los momentos más complicados. Ya sabéis a lo que me refiero: ese momento en el que tu mejor amiga te deja de hablar en 3º de ESO, o cuando crees que no eres capaz de aprobar un examen, o cuando el niño que te gusta que pasa de ti… Vamos, ¡los que vienen siendo los verdaderos dramas de la vida!

Fuera bromas, por supuesto que fue mi coach en todos esos momentos, pero también en otros muchos que, sin duda, sí que fueron complicados. Sin embargo, ella los solventaba con unas pocas (aunque efectivas) palabras, acompañadas de un oportuno “¡anda ya!” o un “eso no es nada” que, por supuesto, yo me creía a pies juntillas.

¡Y madre mía! ¡Cuantísimo echo de menos esas palabras! Además, creo que no soy la única…

¡No es una despedida!

Al revés, más bien es una presentación. «Mi Persona Favorita» es el título de esa pequeñita ventanita en forma de Blog que abrí al mundo hace ya un año y medio y a la que, confieso, no he podido cuidar como se merecía.

¡Nunca es tarde! Aunque este blog no va a tener ese título tan especial, Martamente va a tener la esencia de Mi Persona Favorita y, de algún modo, seguirá siendo esa forma de charlar con ella.

Porque todo el mundo debe conocer que existen personas así de puras, de auténticas y de buenas.

Porque ella ha tenido la mala suerte de sufrir el peor de los robos: el de sus recuerdos.

Porque, aunque pudiese, ella jamás contaría sus hazañas. No creo que admitiese ser tan buena como es y, mucho menos, presumiría de ello.

Precisamente por eso, probablemente, si supiera que escribo estas cosas, me mataría… ¡Pero estoy dispuesta a correr el riesgo!

Martamente tenía que empezar así, dando las gracias a Mi Persona Favorita.

Y sí, para el que aún no lo haya adivinado, Mi Persona Favorita es ella, la eterna, la incombustible: ¡Mi Abuela!

¿Empezamos?